Protegiendo a las especies amenazadas por el tráfico ilegal, con códigos de barras genéticos públicos que permitirán su identificación.

El proyecto Códigos de Barras de la Vida Silvestre México dio comienzo a los Talleres de Estandarización de Protocolos y Capacitación de generación de códigos de barras genéticos

Nota Por: Sofía de Teresa


El pasado lunes 23 de junio de 2014 el equipo mexicano Códigos de Barras de la Vida Silvestre México (participante en el proyecto internacional Barcode of Wildlife Project) dio inicio a los Talleres de Estandarización de Protocolos y Capacitación, donde un equipo de científicos mexicanos y extranjeros provenientes de distintas instituciones y campos de especialidad, se encuentran comparando, analizando y probando, distintos protocolos de generación de códigos de barras genéticos que serán utilizados para crear una biblioteca de referencia pública, que servirá a las autoridades de los países participantes como herramienta de protección de especies amenazadas y en peligro de extinción.

Al respecto de la importancia de este proyecto, la Dra. Virginia León (investigadora en el Instituto de Biología de la UNAM y Coordinadora del equipo participante en México) ha comentado, entre otras cosas, que "es particularmente importante proteger a la vida silvestre de México; nuestro país es la cuarta nación con mayor diversidad en el mundo, y el tráfico ilegal de especies protegidas es una de las actividades humanas que más está dañando a las especies en México y otras partes del planeta."


¿Qué clase de actividades se están realizando en los Talleres de Estandarización de Protocolos y Capacitación y cuáles son los beneficios que traerán a México?

En los talleres que se están llevando a cabo en la segunda fase de este proyecto, se están estableciendo procedimientos estandarizados que darán la posibilidad de garantizar que los resultados de todos los laboratorios involucrados cuenten con la misma calidad y un máximo nivel de efectividad.

Debido a que el enfoque y necesidades de investigación son diferentes para cada una de las universidades e institutos alrededor del mundo, los procedimientos que suelen seguirse en los diversos laboratorios no son idénticos; de manera que en este espacio ha surgido un fructífero diálogo entre los científicos mexicanos y extranjeros, que se encuentran actualmente intercambiando conocimientos, impresiones y experiencias, que les permitirán adquirir nuevas habilidades y potenciar los resultados de sus investigaciones. Por ejemplo, la M. en C. Andrea Jiménez del Instituto de Biología de la UNAM, mencionó: "estos talleres nos pueden aportar muchísimo porque en otros laboratorios utilizan protocolos diferentes y tienen una forma distinta de manejar las muestras. Estamos llegando a un consenso entre los laboratorios sobre cuáles son las mejores prácticas para manejar las muestras; nosotros aprendemos cómo ellos manejan sus reactivos y muestras, y ellos a su vez, aprenden cómo lo hacemos nosotros; el chiste de estos ejercicios es esa retroalimentación. Por ejemplo, hoy en la mañana hice una demostración de técnicas de extracción de ADN de hueso, porque trabajé hace unos años con ADN antiguo en proyectos de Paleogenómica, y ellos suelen trabajar en sus laboratorios con tejido fresco."


Por su parte, la Dra. Natasha de Vere (Directora de Ciencia e Investigación del Jardín Nacional Botánico de Gales, e investigadora invitada al proyecto BWP por CBOL) mencionó: "otra de las cuestiones que me ha parecido muy interesante de este proyecto, es que al entrar en contacto con científicos de otros países del mundo he aprendido mucho, pues me he familiarizado con los protocolos que utilizan en otras regiones para generar códigos de barras genéticos; particularmente en México, donde tienen experiencia en el manejo de la tecnología de códigos de barras genéticos, y esa retroalimentación es importante."

Como parte de la realización de este taller, también se están llevando a cabo actividades de capacitación que posibilitarán a los laboratorios mexicanos aumentar el número de científicos especializados en las técnicas de generación de códigos de barras genéticos y así facilitar en el futuro la realización de investigaciones con códigos de barras genéticos. Estas actividades también tienen la intención de familiarizar a los científicos participantes con los protocolos de generación de códigos de barras genéticos que se irán estableciendo para el proyecto. Dichos talleres están siendo impartidos por científicos altamente experimentados y destacados en su campo de especialidad: Dr. Gerardo Salazar (Jefe del Departamento de Botánica del Instituto de Biología de la UNAM), Dra. Natasha de Vere (Directora de Ciencia e Investigación del Jardín Nacional Botánico de Gales e investigadora invitada al proyecto BWP por CBOL), Dra. Niamh Redmond (Investigadora en CBOL, con sede en el Instituto Smithsoniano de Washinghton D.C., y actualmente Manager de los Proyectos de Laboratorio del Barcode of Wildlife Project), y M. en C. Andrea Jiménez (Encargada del Laboratorio de Sistemática Molecular de Zoología del Instituto de Biología 1 de la UNAM).

En México, el equipo Códigos de Barras de la Vida Silvestre México está siendo coordinado por la Dra Virginia León-Règagnon del Instituto de Biología de la UNAM, quien además de ser una pionera en la implementación de investigaciones con códigos de barras genéticos en nuestro país, ha realizado junto con otros investigadores estudios importantes sobre platelmintos parasitarios a partir de la aplicación de la tecnología de códigos de barras genéticos. Estos estudios han aportado información útil que permitirá en el futuro desarrollar sistemas de control más efectivos para esta clase de parásitos.

La Dirección General del Proyecto Internacional Barcode of Wildlife Project está a cargo del Dr. David Schindel (Secretario Ejecutivo de CBOL, con sede en el Instituto Smithsoniano, Washinghton D.C.).


Así mismo, dado que la tecnología y métodos de captura de datos para esta clase de investigaciones ha evolucionado, se ha traído a México con el financiamiento de Google Global Impact Awards, nuevos equipos que permitirán a los científicos participantes obtener un mayor nivel de eficiencia al capturar los datos de las muestras. Los cursos que permitirán a los científicos mexicanos familiarizarse con estas herramientas, están siendo impartidos en este taller por los M. en Bioinformática Michael Trizna y Meagan Parker. Al respecto, la Dra. Virginia León comentó que: "en México, cada colección o cada investigador utilizaba su propio sistema para capturar los datos de campo, los datos de recolecta de cada ejemplar, almacenarlos y procesarlos. Había que capturar los datos de colecta del ejemplar, y luego recapturar esa información para crear bases de datos que pudieran ser procesadas en el laboratorio.  El sistema que estamos aprendiendo, vincula las bases de datos que se toman del ejemplar con bases de datos del laboratorio que te ayudan a seguir todo el proceso; desde la extracción del ADN, hasta la secuenciación, de manera que sólo hay que capturar los datos una vez y esto hace mucho más eficiente el proceso. Los científicos extranjeros que han llegado también han conocido otras cosas, y nosotros también nos estamos beneficiando mucho de estas herramientas; el programa (genius) y las herramientas de captura de datos."

Fotografías: Sofía de Teresa (BWPM). Creative Commons, prohibida la reproducción para fines comerciales, es necesario dar crédito para hacer uso de la imagen.